domingo, 6 de abril de 2014

METROPOLIS (FRITZ LANG - 1927)


87 años son muchos. Más que muchas vidas. Y darse cuenta que una película concebida y realizada hace 87 años nos impacta y nos conmueve hasta lo más profundo únicamente quiere decir una de estas dos cosas: O somos de los que pensamos que cualquier tiempo pasado fue mejor o estamos ante una obra eterna, maestra y genial. Podría decir lo mismo de otra joya como es Amanecer de Murnau, pero en este caso pongamos que hablo de Metrópolis de Fritz Lang.

Fijénse que en ningún momento dije “perfecta”. La perfección es el pastel con la guinda incluida. En Amanecer la perfección corona cual guinda una gran película. Pocas obras merecen la rotundidad del 10 como esa maravilla del danés. Pero Metrópolis es un digno rival, aspirante a la máxima nota, y tal vez yo resulte ser un juez demasiado duro y me frene la convencionalidad de un final que bien podría haber sido otro. En cualquier caso les anticipo que mi nota será buena porque sin duda es uno de los mejores films que he visto en mucho tiempo.

No se si les pasa a ustedes pero me sucede que hay películas con tanto prestigio que aunque se que no me defraudarán y quizás por eso mismo, demoro su visión de forma inexplicable. Cuando hace tiempo ví Sunrise (Amanecer) no sabía lo que me iba a encontrar. Mi boca se abre aún de sorpresa. Metrópolis es un film con prestigiosos antecedentes. Hoy lo he confirmado y tan sólo una delgada línea diferencia ambas bocas abiertas.

Porque parece increíble que en 1927 pudiesen conseguirse unos efectos visuales de tal calibre. Por la vía de la maquetación o la de la tecnología y la ciencia, la urbe se nos hace real y futura. Incluso mucho mas futura que lo que nuestros conceptos actuales conciben como probable para dentro de unos pocos siglos. Lang en ese sentido es un visionario con capacidad para que sus sueños tomen forma y simulen reales. Todo un lujo sus equipos especializados e incluso el mismo Fritz con sus conocimientos arquitectónicos y sus ideas traídas de la Manhattan de los 20.

Mas allá de las formas tenemos el contenido y aunque podríamos hablar de dos líneas principales, las referencias religiosas con la figura del Mediador, y la línea revolucionaria donde las masas se revelan contra las máquinas y sus opresores, en el fondo es una única directriz cristiana con Jesucristo el hijo del gran Dios malvado de Metrópolis, llevando a sus hermanos a una vida mejor y sellando alianzas con el “cielo” para lo cual hay que sufrir una especie de catarsis comunista-revolucionaria claramente relacionable en el fondo con el cristianismo eso sí, despojándola de matices violentos contrarios a la ley de Dios.

Y luego está eso que se ha llamado Expresionismo Alemán que si alguien no conoce de que va esto, le recomiendo que no pestañee en la escena de las catacumbas donde María (para mi, una clarísima referencia a Juan El Bautista) huye de la persecución a la que somete el inventor del ser máquina. Luces, sombras, gestos, terror se entremezclan en una especie de baile capaz de conmover a los espectadores 87 años después. Y a quienes afirmen que la película no gustó en su tiempo les digo que no me influyen las circunstancias ajenas propias de otras condiciones y culturas. Si me dejase influenciar por ello perdería lo que soy. Respeto otras opiniones pero mantengo la mía.

Al respecto de los actores he leido: “¿Los actores?, pues eso, actores de cine mudo “ en tono tan despectivo como desconocedor de la tremenda dificultad de la expresión unicamente con gestos. Para mi están geniales en su conjunto, pero por encima de todo, ella, María (Brigitte Helm), en su doble papel de guía espiritual y bruja lujuriosa. El Oscar de mi admiración hacia su excepcional interpretación.

Y a pesar de algunos recursos finales algo socorridos, la espectacularidad de la destrucción, las masas furiosas, la inundación, la ascensión de los niños hasta la salvación de los jardines eternos son momentos de una espectacularidad que se podrá imitar pero no repetir. Gracias Fritz.

Puntuación: 9,50

6 comentarios:

miquel zueras dijo...

Una película puntual del género futurista. Se nota que fue rodada en 1927 porque los protagonistas fuman ¡y con cerillas! La escena de los obreros acudiendo como zombies a su trabajo no ha perdido ni un ápice de actualidad. Y ese inolvidable robot...
Vi la película en esa copia restaurada con música de Freddy Mercury en la Filmo con algunas escenas viradas en color.
Saludos. Borgo.

Javier Simpson dijo...

Es una genialidad, a la altura del mejor Chaplin o de pelis tipo El Último o La pasión de Juana de Arco. Pelis todas ella imprescindibles y que todo buen aficionado al cine debería no perderse. Padre, he pecado: todavía no he visto Amanecer, pero caerá, sin duda caerá más pronto que tarde. Un saludo, FATHER Entrada estupenda.

El Despotricador Cinéfilo dijo...

Amigo Father, "Metropolis" es una gran Obra Maestra indiscutible, pero puestos a ser quisquillosos creo que fue un error (creo que fue en la década de los 80 en una restauración) donde le metieron unos 30 minutos adicionales llegando a durar la película tres horas. Esa versión de tres horas se me hace pesada y desequilibra un poco la película. Fue innecesario añadirlos porque ya era perfecta con sus 150 minutos originales.

En cuanto a "Amanecer" creo fue el inefable Carlos Pumares el que dijo que una de las cosas que hay que hacer al menos una vez en la vida es ver "Amanecer". Estoy totalmente de acuerdo. Es mi Murnau favorito y una de esas incuestionables Obras Maestras Absolutas de la historia del cine. Pocas veces en la historia del cine se han rodado escenas de amor tan verosímiles como las de la pareja protagonista. Una joya.

FATHER_CAPRIO dijo...

Miguel: La música de Mercury creo que le sienta bien seguramente porque la asociamos a una idea de futuro. Tiene escenas geniales. También la clonación del ser maquina. La inundación. etc. Eso si, la de los obreros es mítica.
Y es una película tan "moderna" que de no ser por el detalle del tabaco y las cerillas no nos hubiesemos dado cuenta de que se filmó en 1927.
El humor es algo necesario...

Saludos

FATHER_CAPRIO dijo...

Javier, habiendo visto Metropolis, La pasión de Juana de Arco o El último, no haber visto Amanecer es un pecado que no se si Padre perdonará. Claro que tampoco me perdonaba mi que no hubiese visto Metropolis. Ando en penitencias...

Un abrazo

FATHER_CAPRIO dijo...

DC:
Al no haberla visto en versión digamos "reducida" no estoy en condiciones de valorar, pero digo que es una obra maestra y una genialidad. Pero la perfección la dejo para SUNRISE, coincidiendo plenamente contigo incluso en tu "apreciación" de Pumares.
En su día la comenté en Filmaffinity y me siento orgulloso de como se valoró mi crítica.
Un abrazo